En la madrugada del 23 de agosto la Oficina de Emergencias alertó a los residentes de los terrenos aledaños al Río. Mientras, Cindy escribió lo que ocurría en Facebook.
—Pero a la verdad q el rio de Salinas está loco… Me madrugaron q mal me va….
—Q si loco, escribió Lilibeth
—Jaja, está brutal!!! X lo menos fue x la mañana q si nos llega a coger de noche como la última vez nos chavamos… Y la policía ya empezó a joder.
Sii…, falta poco para salirse del puente, jummm y apenas está comenzando el día. ! q no llueva más !, fue la respuesta de Lilibeth.
— Si mija yo estoy acá x el puente.. La defensa civil dijo q viene otro golpe.
Alarmada Lilibeth escribió:
— qqqqqqqqqqqqqq, y yo en mi casaaa. Me voy, ya mismo cojo para aya.
— Llega aquí a casa d abuela… Yo me fui de casa. No quiero ver el río meterse a mi casa 🙁
— Jumm. Estamos iguales. Yo q volví a acomodar las cosas otra vez, ps q sea lo q Dios quiera. Te veo allá.
— Yo termine x la mañana de subir las cosas… Este río es traicionero, cuando menos t lo imagina lo tienes en la sala d tu casa lol.
—hay dios mioo…
—Ten mucho cuidado… Están seguros tú y tu familia… “, escribió Javi.
—Gracias javi… Nos movimos pa lo alto…
Mientras tanto el Río Abey amenazaba con salirse de su cauce, como tantas otras veces…

