Para llegar a Jayuya
lleva en el alma un clavel,
que en el rojo de su piel
habita la tierra tuya.
Sube la cuesta cantando
canciones llenas de sol,
canta como el ruiseñor
que canta como llorando…
El cafetal, a lo lejos,
en tu mirada se pierde
y aquella montaña verde
la aurora arropa en reflejos.
Ya yo me acerco, es el día
que me anuncia en su Aleluya
que voy llegando a Jayuya,
que ahí está la Patria mía…
Si buscándola, en tu anhelo,
ves una estrella muy alta
que en tus ojos se levanta…
¡es que estás llegando al cielo!
Búscala en los barrancales
florecidos de amapola,
búscala en la estrella sola
que gritó Blanca Canales…
Búscala en los cafetales
y en los ecos del plantío,
en las gotas de rocío
que tiemblan con mi canción…
¡Búscala en tu corazón,
porque tu pueblo es el mío…!