Ya en la tierra no hay fortuna,

Se acabó el tiempo de sueño.

desde hoy tendré de  empeño,

arrancar para la Luna.

 

Ya no quedan fronteras,

que agiten el corazón.

Piensa lo que tú quieras,

para la Luna voy en avión.

 

Buscaré de compañera,

la que tenga buen corazón.

una marciana rumbera,

hambrienta de pasión.

 

Y si llega un yanqui elegante

plantando bandera y haciendo plante.

Gritando alzo el machete,

¡Aquí se acabó el cachete!

 

©Roberto López