En la tristeza que existe en mí
Tú resguardas el amanecer
Con trazos finos marcados en mí consuelo.
En los temores que me rodean
Me das valor indeleble, con tu presencia,
Aunque sólo prevalezcas en mi memoria.
Eres el ser que compone mi alba
Eres el guardián que sostienes mis alas
Eres vida, vida mía
Eres la sombra placentera del sentimiento,
Que provoca el amor.
Y fue a ti a quién
Entregue mi quebrantado corazón…
Por Maileen Torres Rodríguez, 8 de enero del 2010.