Estaba tirado, con dos tiros en el pecho, sobre la esquina de un Salvation Army. No moría aún. De hecho, su consciente alerta trabajaba a las mil, pero la hemorragia manaba a caudales. Valoraba lo que hizo. Fue mucho y heroico para un desamparado de Sky Road. Después de muchos meses, por un motivo que parece frívolo, se animó a bañarse y, creyendo que nadie lo observaría, se robó un calzoncillo, de paquete.
Otro cliente en el baño del Salvation vio que extraía el calzoncillo de su envoltura de papel celofán. Al principio, creyó que sería suyo, pero avisaron sobre tal hurto y él fue quien dijo, acusándolo, al dueño del calzoncillo, ‘sé quién es el ladrón’. Por saberse colaborativo, se asustó después que el sujeto estrenó una pistola que adquirió ilegalmente vaciándole dos balas en el pecho al acusado. «No es justo», habría explicado a él la víctima. «Lo hice no por ser un pillo vicioso. Hoy tenía una promesa de amor. Si me hubieras dado tiempo de explicarte, habrías entendido».
Tener una promesa de amor es el mayor incentivo para la higiene. Un calzoncillo pulcro, nuevo si se puede, es un tesoro cuando uno se desnuda ante una pareja que admite consensualmente darte toda una noche. Quería halagarla. Llevaba años sin sexo, despreciado como un apestoso. Era peor que todos los pordioseros, pese a que como muchos vivía en la calle.
«Estaba seguro que alguien me llenaría de ternura», pensaba cuando acabó de morir.
© Carlos López Dzur 03-11-2000
El autor Carlos nació en Puerto Rico el 1 de septiembre 1955. Miembro de la Generación Literaria del ’70. Se inició con la publicación del libro de cuentos «Sarnas de la ira parda», considerado el primer libro de narrativa importante y renovadora de esta generación. En Puerto Rico, hizo estudios con el filósofo austríaco Dr. Alfred Stern e hizo investigación histórica sobre la invasión norteamericana de 1898 y la violencia campesina. Colaboró en la prensa y comenzó el primero de sus libros poéticos, «Las zonas del carácter». Desde 1983 radica en California, Después de hacer una licenciatura en Artes en Literatura Comparada e Historia Latinoamericana, realizó estudios graduados en Filosofía Contemporánea y se doctoró en la Universidad de California. Se ha dedicado al periodismo y la enseñanza. Fundó la revista Sequoyah, la que hoy pervive en formato virtual.