El conocido intelectual italiano Umberto Eco afirmó en una entrevista con la Revista brasileña Época que los cibernautas no pueden separar la mala o buena información que obtiene a través de la Internet. 

Calificó a la Internet como un “mundo salvaje y peligroso” para las personas ignorantes porque “la Web no filtra nada, es buena sólo para el que sabe dónde está el conocimiento. Habrá multitudes de ignorantes usando internet para tonterías: chat, noticias irrelevantes y juegos”.  

Ciertamente la Internet es un medio que no filtra la información lo que expone al usuario a una enorme cantidad de información inexacta, sesgada o irrelevante que en nada contribuye al desarrollo intelectual de los individuos. 

Como la mala información abunda en la internet Umberto Eco aboga porque las universidades desarrollen un “teoría de filtro” para seleccionar el contenido de la internet. “Sería necesario crear una teoría del filtro, una disciplina práctica, basada en la experiencia cotidiana con internet. Es una sugerencia a las universidades, elaborar una teoría para el filtro del conocimiento, conocer es saber separar”, afirmó. 

Exceso de información

El autor “recalca que demasiada información intoxica y crea amnesia”, es decir que la gente termina cerrando los oídos ante el exceso de información que los apabulla. “Todo nace en Internet sin jerarquía, evaluó. La inmensa cantidad de cosas que circula es peor que la falta de información, el exceso de información provoca amnesia, la información abusiva hace mal, cuando no nos acordamos lo que aprendemos, quedamos parecidos a los animales”. 

La preocupación de Umberto Eco sobre el carácter y la calidad de la información contenida en la Internet no es nueva, como tampoco lo es su propuesta de una “teoría de filtro” La invención de la Internet significó indudablemente una explosión de información y un reto para la selección entre la buena y la mala información. 

Censurar o controlar la publicación de textos o imágenes en la Internet no puede ser la respuesta al asunto. La democratización del medio no puede ponerse en peligro. Eso sería otorgarle al estado y al poder económico permiso para coartar la libre expresión en el medio de comunicación masivo más individualizado creado hasta el momento. 

La solución propuesta por los educadores hace más de una década es la masiva capacitación de los individuos en el manejo crítico de la información. La alfabetización informacional proporciona las herramientas para discriminar entre la información buena de la mala, entre lo importante y lo accesorio. Contribuye dentro de la totalidad de la educación a lo que afirma Umberto Eco, cuando dice que la función de la memoria cultural no es solo conservar, sino también filtrar.

Dotado de criterios para evaluar el carácter y naturaleza de la información el individuo estarán en posición de seleccionar información que contribuya positivamente a su acervo de conocimiento y a su desarrollo intelectual. Con toda probabilidad quedará también inmunizado contra la intoxicación informativa que le producen los medios.

 

srs