Aunque Salinas no es un pueblo de tierra adentro, ha tenido destacados exponentes de la música típica puertorriqueña a distintos niveles artísticos. Nos referimos a esa música autóctona, que identifica al puertorriqueño como jíbaro y que nació al calor de la evolución étnica de españoles a boricuas-criollos, con su instrumentación clásica: el típico cuatro de cinco cuerdas dobles, la guitarra y el güiro.
Uno de esos salinenses exponente de la música rural puertorriqueña fue Luis Rivera Torres, llamado por sus conocidos por el apodo de Luis Güiro, y artísticamente como el Jíbaro de Salinas.
De la música típica de Puerto Rico se han identificado más de 150 tipos de seis y más de 50 tipos de aguinaldos. Fue en los campos del centro de nuestra Patria donde más activamente se desarrolló y se continúa cultivando esa música, también llamada campesina.
Luis, con su gran talento, supo proyectar nítidamente muchas de esas variantes musicales puertorriqueñas, para nuestro deleite a nivel regional y en Nueva York. Era un personaje de extracción humilde. Nació en la barriada Borinquen, a las orillas del río Salinas, mejor conocido cono río Niguas. Siempre vivió orgulloso de su barrio. Allí nació junto a sus hermanos Manuel Rivera, un maquinista prestigioso que laboraba para Aguirre; y el menor al que llamaban Cano.
A los 13 años pierde a su madre, Isabel Torres, conocida como Cocorón. A esa temprana edad comienza a cantar rosarios. Eso le ganó mucha popularidad no solo en Salinas, sino en los pueblos limítrofes, donde también acudía a cantar rosarios.
En esa etapa se refina en los cantos populares de los seises y los aguinaldos y poco a poco fue solicitado para cantar nuestra música típica por todos los barrios y pueblos cercanos a Salinas.
Luis Güiro cantó en programas de la vieja WXRF de Guayama, amenizados por Richard Ortiz y Héctor Meléndez Montes. También en las estaciones radiales ponceñas de la época como WISO, WLEO Y WPAB.
En 1954 se traslada a la Ciudad de los Rascacielos donde reside por 22 años, junto a su esposa Migdalia, hija de Mageño, un experto maquinista de la antigua colonia La Isidora. En Nueva York logró compartir tarima con los grandes de la trova de antaño. Entre ellos, El Cantor de la Montaña, el inmortal Ramito, con quien grabó para Ansonia Records una controversia en tiempo de aguinaldo titulada Desafío.
En Nueva York participó en los programas radiales de WADO, poniendo el nombre de Salinas en alto con su bien timbrada voz que lució donde quiera que se presentó.
Poseo los tres LP´s que grabó. El primero con SMC Pro Arte, acompañado de Cándido Vicente. Luego grabó con Orozco Records, en una juntilla musical con Juanchín Santana y Corozo y su Cuarteto.
El tercer disco lo grabó bajo el sello de Dalia Records, donde hay dos canciones, El anuncio de mi muerte y La muerte del jibarito, dedicadas al rumor que circuló por toda la ciudad de Nueva York informando sobre su muerte.
Para el 1976 regresa a su Salinas querido y creó un programa campesino a través de RADIO WHOY y animado por los locutores Melvin González y Martín Colón, Jr.
Nos encontramos en el año 1977 en Salinas donde me dijo que ya tenía 55 años, por lo que asumo que nació entre 1921 y 1922. Residía en la Extensión La Carmen.
Luis Güiro fue uno de nuestros máximos exponentes en los rosarios cataos, por su entrega a nuestra música típica y por su trayectoria profesional en representación de nuestro pueblo allende los mares, con su jíbaro cantar. Falleció en 1986 o 1987 de un paro cardíaco que apagó su cantarina voz campesina. Que en paz descanse, el amigo y hermano Luis Güiro, otro salinense para la historia.
©© José Gumersindo Torres